Estas butias del paseo de Recoletos han sido catalogadas como especies singulares por la Comunidad de Madrid.
Se encuentran cerca una de la otra y a la altura de la calle Bárbara de Braganza. Una de ellas al lado de la estatua dedicada a Valle Inclán.
Son árboles procedentes de Brasil, Uruguay y Argentina, donde crecen en sabanas o bosques de lugares muy secos.
Butiá es el nombre por el que se conoce a estas palmeras en Brasil, capitata es un vocablo latino que significa cabezuela, aludiendo a la aglomeración de frutos.